Reflexión de hoy

En cada abrazo que tú des esta noche de recibo de 2009 entrega la paz y la armonía que tienes dentro de ti. Entrégala sin medida, en abundancia, no te preocupes por cantidad, pues una vez que empiece a fluir se hará inagotable, porque Jesús la multiplicará -como hizo con los panes y los peces- en cada abrazo que tú recibas de vuelta. El resto será disfrutar de la prosperidad espiritual instantánea que se sentirá, la cual es propia de todo ambiente cargado de paz y armonía. Logremos que la paz y la armonía dejen de ser palabras y se conviertan en arraigados sentimientos en cada uno de nosotros.

Reflexión de hoy

Al acercarse la hora final del año la mente se pasea entre la gratitud y la esperanza, entre los buenos augurios y los planes para hacer cosas pendientes, entre el regocijo por el punto y aparte y las expectativas de un nuevo inicio. La palabra prosperidad cobra vigencia extraordinaria, convertida en lo mejor que se puede pedir a Dios, junto a salud, para los seres amados. Dando gracias a Dios por todo lo concedido, le pido para ti, para mí, para la humanidad toda, prosperidad espiritual, que es la que proporciona verdadero poder, independencia y total seguridad en el porvenir, porque una vez que se obtiene no hay especulador capaz de hacer que su poseedor la pierda.

Reflexión de hoy

Paz y armonía, más un poco de alimentos, es todo lo que se necesita para vivir tranquilo. De ello dan fe las tribus que han logrado permanecer con sus costumbres milenarias casi intactas y que, lamentablemente, son descubiertas, aunque lo han hecho todo para esconderse del hombre moderno en las profundidades de las selvas que todavía no han sido desmontadas por éste. Es paradójico, pero las tribus ven como una oportunidad de supervivencia la inhospitalidad que se acrecienta selva adentro, pues ya vieron desaparecer en las fauces de la modernidad a sus hermanos que entraron en contacto con “civilizadores” que hoy buscan, haciendo la guerra, ¡tremenda paradoja!, la paz y la armonía que desecharon junto a las leyes de la naturaleza y el Espíritu.

Reflexión de hoy

“En mi interior medito, y me pregunto: ¿Acaso va a estar siempre enojado el Señor? ¿No volverá a tratarnos con bondad? ¿Acaso su amor se ha terminado? ¿Se ha acabado su promesa para siempre? ¿Acaso se ha olvidado Dios de su bondad? ¿Está tan enojado que ya no tiene compasión? Lo que más me duele es pensar que el Altísimo ya no es el mismo con nosotros. Recordaré las maravillas que el Señor hizo en otros tiempos”. La meditación tiene vigencia hoy, pero corresponde al salmo 77(76):6-11. De ella se deduce que Dios nos ha dado milenios para que recompongamos el mundo por nuestra cuenta, pero la humanidad, que ha construido naves para viajar por el espacio, no ha sido capaz de sentarse a reconstruir la paz y armonía con las cuales nos entregó el paraíso.

Reflexión de hoy

¿No conformaríamos con que Dios nos perdone a medias? De ninguna manera. Pues entonces perdonemos por completo, liberémonos de odios y rencores. Aprovechemos la ola de felicidad del período, pletórico de buenos deseos dados y recibidos, para deslizarnos en un solo viaje hasta la playa de la paz y la armonía, y establezcámonos allí para siempre. Paz y armonía es todo lo que necesitamos para vivir conforme a los mandamientos del Padre, para agradarlo y servirle como lo hizo Jesús. Perdonemos de corazón a todos los que debemos perdonar, pues así nos perdonamos nosotros mismos y recibimos el perdón del Creador.

Reflexión de hoy

Los comentarios sobre la cena de Nochebuena cobran impulso hoy entre los que regresan a su centro de trabajo. Y los comentarios se conectan con los planes que se hacen para la despedida de 2008 y el recibimiento de 2009. El ánimo festivo está por todo lo alto y ¡qué bueno que así sea! La alegría es un bálsamo que trae salud, siempre que llegue al centro de nuestro Espíritu y no se quede en la superficialidad. Alegres somos capaces de dar en abundancia. Ojalá que podamos enfocarnos en dar perdón y ojalá que nuestro perdón sea tan grande que con su peso aplaste para siempre cualquier ofensa que hayamos recibido en el pasado. No olvidemos que en la medida que perdonemos seremos perdonados.

Reflexión de hoy

Imbuidos del gozo por la conmemoración del nacimiento de Jesús, el momento es propicio para pedirle a Dios como lo hizo el salmista en el capítulo 119 (118):33-36 “Señor, enséñame el camino de tus leyes, pues quiero seguirlo hasta el fin. Dame entendimiento para guardar tu enseñanza; ¡quiero obedecerla de todo corazón! Llévame por el camino de tus mandamientos, pues en él está mi felicidad. Haz que mi corazón prefiera tus mandatos a las ganancias mal habidas”. Es inevitable al leer este último versículo pensar que debemos pedirle también que haga que quienes manejan los gobiernos y la economía mundial le pidan exactamente lo mismo, pues son las ganancias mal habidas de las minorías las que provocan necesidades en la mayoría.

Reflexión de hoy

“Noche de paz/noche de amor/todo duerme en derredor. Entre los astros que esparcen su luz/bella anunciando al niño Jesús/brilla la estrella de paz/brilla la estrella de paz”. Es difícil que un muchacho de más de 60 años no tenga estampada en su mente esa estrofa, la primera de las tres que escribió Joseph Mohr en su tierno villancico navideño. Ojalá que la de hoy sea una noche de paz, una noche de amor, con todos los hogares despiertos en derredor. Y que todos podamos esparcir una luz de armonía, anunciando en nuestra fiesta la presencia de Jesús, para que brille la estrella de la alegría espiritual, dando su mejor esplendor a la humana. Que Dios esté con todos nosotros hoy, y siempre.

Reflexión de hoy

Agradecer a Dios porque los proveyó, pedir su bendición para cada uno de los obsequios y entregarlos a nombre de Jesús es ponerle un extra invalorable a cada regalo que se haga en este período navideño. Es un deber, que no debemos soslayar, ratificar entre los adultos y crear conciencia en los pequeños de que Dios es quien provee, procurando neutralizar la presunción, el orgullo y la grosera vanidad que no son del agrado del Padre, pues, si presumir es algo que todavía no podemos evitar completamente, de esa manera de lo que estaremos presumiendo es de que Dios ha manifestado su generosidad para con el receptor a través de nosotros.

Reflexión de hoy

Tanto si vamos a recibir en nuestra casa como si nos vamos a trasladar a la de alguien apreciado, al día de hoy ya sabemos cuales son los carnales que compartirán con nosotros la cena de Nochebuena pasado mañana. Pero, sin duda, el cruce de llamadas en nuestro grupo continuará para asegurarnos de que los más remisos están en la cosa, hacer algunos recordatorios y seguir elevando los ánimos hasta el cielo. Hablando del cielo, hay que darle su llamadita también a Jesús, porque, aunque sabemos que para nada es remiso, es demasiado comedido y sólo hace acto de presencia cuando está seguro de que la invitación que le hacemos es de corazón, y no por mero compromiso familiar.

Reflexión de hoy

Tras leer 1 Corintios 13:4 -donde se nos dice, entre otras cosas, que “no tener envidia, ni ser presumido, ni orgulloso, ni grosero, ni egoísta” es tener amor- queda claro que la demostración de amor que le interesa a Dios se diferencia de la que se suele practicar en la sociedad. Es mediante regalos, mientras más costosos mejor, que se expresan muchos amores terrenales, pues hemos sido inducidos por el comercio a pensar que amar tiene relación directa con regalar. Es importante saber cuánto más que de amor genuino hay de la presunción, del orgullo y de la grosera vanidad que no agradan a Dios en los regalos hechos para impresionar. Es conveniente hacer la revisión.

Reflexión de hoy

El amor de Dios hacia nosotros es eterno, y qué bueno es que sea así, como todo lo suyo, para siempre. Es deber nuestro corresponderle de igual manera, manifestándole nuestro amor con todas nuestras acciones, pues el amor es el único combustible capaz de impulsarnos hasta las alturas del reino eterno, “porque tener amor es saber soportar; es ser bondadoso; es no tener envidia, ni ser presumido, ni orgulloso, ni grosero, ni egoísta; es no enojarse ni guardar rencor; es no alegrarse de las injusticias, sino de la verdad”, podemos leer en 1 Corintios 13:4. Los requerimientos lucen abultados, pero, si nos fijamos bien, menos los dos primeros y el último los demás son lastres que podemos quitarnos fácil de encima.

Reflexión de hoy

Toco las hojas que me regalan sus tonos verdes y matices blancos entretejidos sobre marañas de nervaduras por donde circula agua que le brindo en la mañana. Toco y miro apacible, pero, inadvertidamente, llegan los compromisos pendientes a golpear en mi mente con la misma contundencia que en el momento lo hace el estridente martillo neumático que invade mis oídos desde la construcción vecina. Paladeo la nada, con piel erizada, y en un instante de descuido la inquietud baila frenética con mis sentidos, hasta que logro reenfocar mi integridad hacia el amor de Dios. No hay que descuidarse un momento, me digo recuperado, y sigo andando agradecido. “El amor del Señor es eterno”, Salmos 118(117):4

Reflexión de hoy

Aceptar sin cuestionamiento alguno esto que dijo Jesús: “Yo soy el camino, la verdad y la vida” equivale a centrarse íntegramente en el propósito de cumplir con el plan divino, delineado de manera sencilla y precisa en los 10 mandamientos, que, dicho sea de pasada, son fáciles de cumplir, porque todos están subordinados a uno, el primero: “Amar a Dios por sobre todas las cosas”. Ocupémonos de no fallar en el cumplimiento de este mandato y los demás caerán como la hilera del dominó. Del amor a Dios sólo mana bondad y oposición a tentaciones de cualquier tipo, porque tenemos claro que Él está por encima de todo. Concentrémonos en eso, y haremos mejor al mundo.

Reflexión de hoy

Cuando sientas que el Padre escuchó tu llamado y está cerca de ti, no salgas en el inicio de tu conversación con Él con la lacrimosa pregunta ¿por qué…?, que casi siempre se completa con: …me está ocurriendo esto a mí, …le pasa eso a esa persona, etcétera; eso es perder tiempo y la oportunidad de conocer lo importante que hay detrás de cada situación. Al porqué de lo que nos ocurre le encontramos respuesta si hacemos una introspección sincera. A Dios debemos preguntarle ¿para qué…?, con todos nuestros sentidos atentos para captar la respuesta instintivamente y ponernos en acción de inmediato de cara al porvenir, centrados en cumplir con el plan divino.

Reflexión de hoy

Dios no es ni principio ni fin; Dios es siempre, por cuanto es eterno, algo que todos sabemos, incluyendo a aquellos que presumen de ateos. Como también sabemos que está en todas partes. Mas, parece absurdo, es en situaciones difíciles -cuando tocamos fondo y activamos todas nuestras potencialidades para emerger- que percibimos su presencia con intensidad. La razón es que a casi todos las alturas nos marean y el mareado pierde los sentidos, sin los cuales no es posible clamor alguno y las manifestaciones de amor y de fe que debemos hacer para percibir la presencia divina junto a nosotros. Así que antes que lamentarse por una situación difícil, debemos pensar que es una oportunidad de sentir al Padre al lado nuestro.

“No soy el mejor de los hijos, pero sé que tengo el mejor de los padres”. Esa joya que acabas de leer me la acaba de entregar en un correo electrónico mi amigo Carlos Rodríguez, el ángel guardián de Diario Divino. Esas 16 palabras constituyen una divisa esplendorosa, que todos debemos hacerla nuestra, por que son alimento puro para la fe, para confiar a plenitud de que Dios nos ofrecerá su amparo el día que lo busquemos bajo la luz del cumplimiento de sus mandamientos. Vuelvo y pronuncio la frase: “no soy el mejor de los hijos, pero sé que tengo el mejor de los padres”; me encanta y pienso que a Dios le agrada escuchar que la repita una y otra vez.

Reflexión de hoy

¿La positiva promesa de que “los humildes heredarán la tierra y disfrutarán de completa paz” es una invitación a que nos pongamos de espalda al dinero? De ninguna manera, porque todo el que está sobre la tierra requiere de dinero para solventar sus obligaciones. Sé que lo único que es peor a carecer de dinero es alejarse de Dios. El propio Dios lo sabe y por ello nos ha dado talento para sustentarnos. La promesa sólo advierte que no seamos malvados para conseguir dinero. Otras advertencias contra el amor por el dinero y la ambición están en la Biblia: “no se puede servir a Dios y al dinero”, palabras de Jesús que recoge Mateo en 6:24, mientras que en Proverbios 1:19 podemos leer la sentencia de que a los ambiciosos “su propia ambición los matará”.

Reflexión de hoy

La conclusión sobre el tema del culto al dinero la dejo para mañana, porque hoy es un día muy especial de recordación, agradecimiento y petición para mí, mis hermanos, mi familia. Un día como hoy vino al mundo doña Lucía, el maravilloso ser que luego me cargó a mí por nueve meses en su vientre para traerme al mundo llena de amor, entregándome con dedicación y paciencia los que hoy reconozco que son mis mayores valores. Así también lo hizo con mis hermanos Mario y Silverio. Las gracias eternas para mi querida madre, para quien pido a Dios que la colme de bendiciones en el plano divino.

Reflexión de hoy

¿No tenemos nada que hacer frente a la cultura que rinde tributo al dinero y desvaloriza al hombre? ¿Terminaremos todos aplastados bajo el peso del dinero? ¿Continuará por siempre en aumento el ejército de los que emplean la maldad y el crimen para hacerse de dinero? La respuesta es no a todas las interrogantes. Hay una fuerza que doblega al dinero en cualquier terreno, y se llama humildad. Es un antídoto contra todas las tentaciones espurias. Dios la provee a todo aquel que dedique su vida a imitar a Jesús. Ahora vamos a leer lo que está escrito en Salmos 37(36):10: “Dentro de poco no habrá malvados; por más que los busques no volverás a encontrarlos. Pero los humildes heredarán la tierra y disfrutarán de completa paz”.

Reflexión de hoy

Usada como acicate para impulsar a los pobres de espíritu hacia la búsqueda de mejoría, la frase “tanto tienes, tanto vales” debe inscribirse como la más punzante del acervo humano, pues intenta degradar al hombre como tal. Sin embargo, en ella se fundamenta el despiadado proceder humano que se generaliza en la sociedad. Es pensando en el tener que un asaltante sale a la calle a matar, si fuere necesario, para valer momentáneamente lo que le pueda quitar a su víctima. Acicateado exactamente por lo mismo, el asaltante de saco y corbata, aunque con medios más sofisticados, se roba los bienes ajenos. Para uno y otro el valor espiritual es inexistente.

Reflexión de hoy

¡Que paradoja! El dinero, creado por el hombre, hoy vale más que su creador. De simple facilitador de operaciones comerciales en su génesis ahora es el bien más importante, el motor que mueve una humanidad proclive al desden del Espíritu. Hoy tiene su mayor vigencia la frase “poderoso caballero es don Dinero”. No es exagerado decir que para los sectores dominantes de la sociedad es el gran caballero, el único con poder real para regular o corromper las actividades humanas. Con esa premisa, mientras más se encumbra el hombre sobre su posesión más capaz se vuelve para arrastrarse por los vericuetos del crimen contra sus congéneres buscando protección de don Dinero, mientras se aleja de Dios.

Reflexión de hoy

Este año propondré hacer algo especial a los familiares y amigos con los cuales celebraremos la Nochebuena, para sentir la presencia de Jesús a lo largo de toda la celebración, y no sólo en el momento en que solemos pedirle su bendición para todos los asistentes y para los manjares que disfrutaremos. Al iniciar la fiesta, me pondré de acuerdo con los presentes para que le asignemos ante la mesa una silla exclusiva para Él. Puedo imaginarme que con cada mirada hacia el asiento de Jesús nos sentiremos dichosos y muy bien acompañados. Sé que será algo inolvidable. Invita tú también a Jesús y anima a otros a que lo hagan para compartir el gozo, aunque estemos en distintos lugares.

Reflexión de hoy

Los preparativos para la celebración de Nochebuena están en plena marcha. No importa la crisis económica, la gente habla con entusiasmo del menú que servirá, del número de invitados que tendrá, los tipos de bebidas, en fin, todo está planificado para la gran reunión con familiares y amigos. Muy bien, pues no debemos dejarnos abatir por la crisis hasta tal punto que dejemos de lado la tradición que conmemora el nacimiento de Jesús. Hablando de Jesús, ¿ya tú pensaste cómo lo va a halagar esa noche? ¿Qué regalo tienes para Él? ¿Dirá tú o algunos de tus invitados algunas palabras para agradarlo y agradecerle? ¿Está eso bien planificado como el menú? Si tienes respuestas para todas esas preguntas, ¡Felicidades!, pero si no las tiene empieza a buscarlas.

Reflexión de hoy

La oración de oraciones es el Padrenuestro. Enseñado por Jesús, en sus primeras cuatro líneas están implícitas sendas pautas para el uso óptimo de don Libre Albedrío. Veamos las líneas con las pautas entre paréntesis: Padre nuestro que está en el cielo (reconocimiento, por cuenta propia, de que Él está muy por encima de nosotros)/santificado sea tu nombre (bendición)./Venga a nosotros tu reino (llamado)/hágase tu voluntad aquí en la tierra… (entrega o sumisión, lo que implica cesión, por cuenta propia, del poder de decidir). Concluyo en que Libre Albedrío es comparable al colesterol, que el organismo lo necesita, pero en exceso le hace daño. ¡Hay que controlarlo!

Reflexión de hoy

Con relación a las demás criaturas de su creación, la mayor distinción hecha por el Creador a los humanos fue la de regalarnos la capacidad de razonar, un extraordinario paquete divino que contiene a… ¡ése mismo!: Libre Albedrío, un articulado lenguaje -cuyo número de palabras ampliamos- y otras formas de expresión con las cuales mostramos nuestros sentimientos. Así que estoy totalmente claro en esto: Libre Albedrío es un valioso regalo divino, imprescindible para gobernar la vida con independencia de criterio en la sociedad, pero es peligroso por veleidoso e influenciable. Lo mejor que podemos hacer con Libre Albedrío está indicado taxativamente en el Padrenuestro.

Reflexión de hoy

Mi cuestionamiento a don Libre Albedrío -empecé a tratarlo de lejitos- se debe a que me di cuenta de que en realidad no es libre nada, porque está muy a merced de las influencias de una sociedad que es presa del culto al dinero, a la arrogancia, a la presunción, a la depravación, a el libertinaje, a la amoralidad y a la corrupción de cualquier género, entre otros males que han sido adoptados como patrones de libertad y éxito sociales. Hay que reconocerlo, Libre Albedrío, apabullado por la masiva promoción en los medios de los antivalores cristianos, se inclina con naturalidad hacia los intereses del materialismo humano, y enfocarlo hacia las enseñanzas espirituales es labor titánica. Por ello, a diario le pido a Jesús que me ayude a controlar a Libre Albedrío, pues sólo con su ayuda puedo echar el pulso e inclinarlo hacia el Espíritu. (Diario Divino 12-05-08)

Reflexión de hoy

Cada día tenemos 1440 minutos para disfrutar o sufrir, consumir o dejar pasar, bien usar o malgastar, o hacer una combinación de todo eso, pues cada uno es dueño de su tiempo y lo usa a su mejor conveniencia, pues para eso contamos con Libre Albedrío. El tema viene a cuento, porque debemos saber cuántos minutos Libre Albedrío le está asignando al Padre de la cuota de 1440 que recibimos día por día. Es importante que lo sepamos, porque si ese señor, Libre Albedrío, está de tacaño y no asigna aunque sea 15 de los 1440 minutos todos los días al Creador, entonces, estamos en el deber de sujetarlo, llamarlo a capítulo, porque nos está poniendo en malas con el Padre. Saca la cuenta hoy, no lo deje para luego. (Diario Divino 12-04-08)

Reflexión de hoy

Es necesario pensar sobre el libre albedrío hasta tener consciencia plena de lo que significa ese don que, quiérase o no, es el esencial para nuestra buena o mala relación con el Padre. No hay duda de que todo el mundo sabe que tiene su libre albedrío, pero con éste ocurre igual que con la respiración: todos sabemos que estamos vivos porque respiramos, pero sólo quienes se ocupan de estudiar y practicar técnicas para respirar correctamente terminan ampliando su capacidad pulmonar, ganan salud y hasta aprenden a deshacerse de las cargas emocionales mediante respiraciones profundas. Así, quienes se ocupan de conocer lo que entraña el libre albedrío, aprenden a manejarse mejor y ganan la cercanía del Padre.(Diario Divino 12-03-04)

Reflexión de hoy

Tengo la impresión de que en este año de calamidades de todo tipo las ansias de la mayoría de las personas por la llegada de diciembre han sido mayores que nunca antes. Esas ansias pueden ser comparables a las que sufren viajeros sedientos del desierto cuando llevan semanas esperando que aparezca un oasis. Debemos tener cuidado con eso porque el constreñimiento sufrido por largo período puede inducir a muchos a caer en los excesos que sus condiciones les permitan, amparándose en la excusa de que por mucho tiempo sufrieron privaciones y el diario bombardeo de una mala noticia tras la otra. Tradicionalmente, con el mes final del año llega la tendencia a perder la prudencia. Diciembre es el mes que más pone a prueba nuestro libre albedrío, hay que cuidarse. (Diario Divino 12-02-08)

Reflexión de hoy

¡Qué cosa! Al mismo tiempo que voy acogiendo entusiasmado los mandatos del Padre advierto que quiere desarrollarse en mí cierta oposición al libre albedrío. Soy consciente de que no debo rechazar ningún otorgamiento divino, así que sé que cuestionar el libre albedrío de alguna manera me pone en falta con Dios. Mas confío en su perdón, porque lucho para callar y seguir adelante sin quejarme por lo pesada que es la carga de la libertad para hacer y deshacer, pero no he podido evitar la recurrente, aunque débil, oposición que aflora por instantes en mi pensamiento. ¡Oh, el pensamiento! El súmmum de la libertad, ahí está el detalle. No hay quien pueda controlarlo, a parte de quien nos dio el libre albedrío.

Reflexión de hoy

Si nos preguntan, todos responderemos que hubiésemos preferido acercarnos a Dios antes de que las tribulaciones hicieran aparición en nuestra vida. Estamos claros en que Él no provoca las tribulaciones, aunque permite que ocurran cuando optamos por alejarnos, y luego las aprovecha para volver a darnos su amparo. Si reflexionamos, nos damos cuenta de que Dios no dejó de llamarnos cuando nos alejábamos, pero nos hicimos los sordos, los chivos-locos o, tal vez, estábamos realmente entretenidos o intoxicados por los vapores del fuego de la pecaminosidad que tiene en ascuas a una sociedad que genera tribulación, y luego descarta sin contemplaciones a los atribulados, a quienes el Padre siempre acoge porque somos sus hijos.

Reflexión de hoy

¿Es posible encontrar alegría en medio de tribulaciones? Sin duda que sí. En el mismo instante en que pensamos que Dios se vale de las tribulaciones para llamarnos a capítulo, para provocar que nos acerquemos a Él, surge una repentina alegría de la cual debemos prendernos con uñas y dientes para que no se escape, porque hará las veces de un flotador en el centro de un mar agitado. Ese destello de alegría es el que nos sacará de la oscuridad de cualquier tristeza. Saber que Dios quiere acercarnos a Él y fijar el concepto, dando gracias por lo que está ocurriendo en nuestra vida, nos conduce sin escala a un plano superior de aceptación y confianza en que, con su guía, saldremos bien de cualquier situación difícil.

Reflexión de hoy

Buscar a diario al Espíritu Santo es vivir inspirado por el amor, pues sólo cuando el amor pauta todos nuestros movimientos se hace posible el encuentro con Él, del cual saldremos fortalecidos y aptos para enfrentar los sufrimientos, los padecimientos propios de nuestra humana naturaleza, de los que nadie escapa -así como nadie ha escapado de la muerte- pues como podemos leer en Hechos 14:22 “para entrar en el reino de Dios hay que sufrir muchas aflicciones”, pero Pablo en 2 Corintios 4:17 nos recuerda que “lo que sufrimos en esta vida es cosa ligera, que pronto pasa; pero nos trae como resultado una gloria eterna mucho más grande y abundante”.

Reflexión de hoy

Hoy tiene lugar una de las más grandes celebraciones en los Estados Unidos: el día de acción de gracias (Thanksgiving). La festividad tiene su origen en 1621, cuando los colonos que lograron sobrevivir a su llegada a estas tierras un año antes, decidieron compartir con una comida parte de los frutos de su primera cosecha invitando a los nativos que les ayudaron a sobrevivir del frío y el hambre que los sorprendió a su llegada en 1620. El gobernador de la colonia proclamó "un día de dar gracias al Señor para que podamos de una manera más especial regocijarnos después de haber recogido el fruto de nuestro trabajo". Como se lee, la intención fue dar gracias al Señor, y eso debe animarnos hoy de manera especial.

Reflexión de hoy

¿Soluciona Dios todos los problemas? Sí, en su tiempo, cuando nuestra fe resiste todas las pruebas y damos crédito, sin la menor duda, a su Palabra. Entreguémosle cualquier problema y empecemos a actuar confiados en que nos indicará la solución, porque somos parte suya. El buen resultado es seguro si aceptamos como válido para nosotros en la actualidad todo lo que Él prometió a su pueblo Israel, haciendo resonar las siguientes palabras: “no temas, que yo te he libertado; yo te llamé por tu nombre, tú eres mío. Si tienes que pasar por el agua, yo estaré contigo; si tienes que cruzar ríos, no te ahogarás; si tienes que pasar por el fuego, no te quemarás, las llamas no arderán en ti. Pues yo soy tu Señor… eres de gran valor y yo te amo”, Isaías 43:1-4

Reflexión de hoy

No hay manera de evitarlo: en la senda humana siempre caminaremos entre los problemas y las soluciones. Así que la preocupación y la celebración se repartirán con intermitencia, aunque no equitativamente, el espacio mental. Los problemas saltan a la vista, pero las soluciones hay que salir a buscarlas.
Solos podemos ver sin dificultad los problemas, pero será mucho más fácil encontrar sus soluciones si estamos acompañados, especialmente si nos hacemos acompañar por el Espíritu Santo, a quien debemos buscar a diario, sin perderle pisada, para ganarnos su compañía y vivir confiados en la protección de su poder solucionador de todos los problemas.

Reflexión de hoy

¿Debemos conformarnos con ver como fugases y lejanos espectadores el concierto de la eternidad? Sería un error si lo hiciéramos, porque estaríamos desperdiciando la oportunidad -que la tenemos- de ser parte del elenco en el escenario divino y actuar bajo la dirección de Dios en una fiesta que durará para siempre. Agradar y servir al Padre e imitar el amor de Cristo por la humanidad es todo lo que tenemos que hacer para ser parte integral de la festividad, anunciada por Jesús en la última cena cuando dijo: “pero les digo que no volveré a beber de este producto de la vid, hasta el día en que beba con ustedes el vino nuevo en el reino de mi Padre”, Mateo 26:29.

Reflexión de hoy

Madurez, quienes disfrutamos de su compañía no debemos cansarnos de hablar de ella, es noble y muy oportuna. De belleza exquisita y serena, nos lleva con su elegancia a escenarios en los cuales nuestros sentidos pueden entrar en sintonía con Jesús, quien inspiró (para que nosotros cantemos, bailemos, interpretemos, declamemos, que cada uno haga lo mejor que sepa hacer) todas las composiciones que agradan a Dios. Madurez -¡enhorabuena!, para que lo sepan y la esperen los más jóvenes- llega batuta en mano para dirigir nuestra más importante audición, la que hacemos ante el Padre buscando aceptación en uno de los coros, el ballet o la orquesta que participarán en el anunciado gran concierto de la eternidad.

Reflexión de hoy

En el capítulo 19 de su evangelio, versículos 28 y 29 -respondiéndoles a los apóstoles, después que Pedro le preguntó sobre qué recibirían a cambio por haberlo dejado todo para seguirlo- Mateo cita a Jesús diciendo: "les aseguro que cuando llegue el tiempo en que todo sea renovado, cuando el Hijo del hombre se siente en su trono glorioso, ustedes que me han seguido se sentarán también en 12 tronos para juzgar a las 12 tribus de Israel. Y todos los que por causa mía hayan dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o hijos, o terrenos, recibirán cien veces más, y también recibirán la vida eterna"; y luego añadió lo siguiente, como colofón: "pero muchos que ahora son los primeros, serán los últimos, y muchos que ahora son los últimos, serán los primeros".

Reflexión de hoy

Con reverencia, continuemos hoy hablando de ella, la incorruptible, Madurez. Es pura gracia divina para caminar hasta donde Vejez, porque nos libra de los apetitos conocidos como lujuria, gula y avaricia, trío pecaminoso, aunque no se pensara que eran tales mientras nos acompañaba la bella y falsa… ¡Esa misma!, tú la conoces, Juventud. Madurez también nos ayuda a disipar la ira, la envidia y la soberbia, que, junto a la pereza y el trío mencionado, forman el despreciable pool de los siete pecados capitales. Como puede verse, Madurez es una sabia compañía que viene directa desde el Creador a guiarnos hacia el renacer, la renovación anunciada por Jesús, como podemos leer en Mateo 19:28/29.

Decidí dejar de hablar de Juventud, se lo merece, pues nada puede llegar a su nivel de falsedad. Ha estado con toda criatura nacida y con ninguna se quedó. A quienes acompaña hoy, más temprano que tarde los dejará irremediablemente. Siempre lo ha hecho así, desde la comisión del pecado original en el paraíso. Mas, como ya sabemos, Dios no deja cabos sueltos ni vacíos que no podamos llenar, así que dispuso que tras la partida de Juventud con su innegable belleza y sus veleidades, llegue Madurez -creatura fiel a toda prueba- para hacernos compañía permanentemente, lo que la hace merecedora de todas las pleitesías, de todos los tributos, de todas las ponderaciones y de que -esto es lo más importante- la disfrutemos con verdadera pasión.

Reflexión de hoy

Si te decides a servir a Cristo, en la medida que lo haces tus sentidos se irán afinando de tal manera que podrá captar el plan divino en la integridad de tu ser. Sucede así, porque Dios es omnipresente y se deja ver en la lectura de la Palabra y en la majestuosidad de su creación; se deja escuchar en el buen mensaje de un hermano; su aroma llega desde flores y rosas, que al tocarlas estimulan el tacto y con variedad de especias estimula el gusto. ¡Oh, el plan divino! Las prisas de Juventud -que es energía y diversión al máximo- generalmente no permiten que se aprecie con claridad, pero, cuando ésta se marcha, Madurez viene y nos muestra su esplendor y utilidad para servir con gozo al Padre. El secreto para disfrutar y cumplir el plan es jamás lamentarse por la partida de Juventud. ¡Puedes creerlo!

Reflexión de hoy

Ser cristiano es estar al servicio de Cristo, pura y simplemente. No hagamos comparaciones entre las iglesias, pues todavía no existe una que sea perfecta. Es sencillo, la integramos los humanos y nada humano es perfecto. Trabajemos, eso sí, para que la iglesia en que militamos se desarrolle como un campo de trigo bien cuidado, librándolo cada día de la mala hierba, lo que es garantía de abundante cosecha. Cuidando de nuestra iglesia, y haciéndola crecer, servimos a Jesús, lo que satisface al Padre. Además, si hacemos que crezca el ejército de los cristianos, no importa la división o el batallón en que estemos, finalmente ganaremos la guerra contra la iniquidad y la indolencia de los gobernantes.

Reflexión de hoy

Luce utópico lograr que los gobernantes del mundo utilicen la perspectiva espiritual en la toma de sus decisiones, pues rinden culto al dinero y lo material, pero eso no debe detenernos para levantar nuestras voces e intentar que así llegue a ocurrir. Grandes conquistas de la humanidad lucieron como utopías puras y simples en el momento de su planteamiento. Para muestra, un botón: la llegada del hombre a la luna. Si el hombre ha sido capaz de llegar a la luna, qué puede impedirle llegar hasta su propio Espíritu, si se le motiva para que lo haga.

Reflexión de hoy

Dar vigencia al Espíritu Santo en nosotros es darnos la oportunidad de ver la vida terrenal desde una perspectiva distinta a la netamente humana que nos mantiene atrapados y que está regida por el “ahora o nunca, no hay más allá”, la ley no escrita que aplican los gobernantes y conductores de la “sociedad moderna”, quienes miden el éxito de sus ejecutorias con la vara del enriquecimiento individual, que siempre es a costa del empobrecimiento de los pueblos que gobiernan. Los que estamos en la búsqueda espiritual, que no somos pocos, tenemos el deber de hacernos sentir, mediante la transmisión del mensaje divino y luchando hasta conseguir que los gobernantes usen la perspectiva del Espíritu para tomar sus decisiones.

Reflexión de hoy

No creen en Dios quienes piensan que todo empieza y termina aquí en la tierra. Desdeñan por completo el sacrificio que hizo Jesús para redimirnos del pecado que nos condenó a la muerte física, al tiempo que nos dio oportunidad de vida eterna. Son personas que privilegian lo material y la riqueza física. Lamentablemente, no son pocos, con el agravante de que son los que gobiernan, y lo hacen con voracidad tal por el dinero que no dejan ningún margen de duda de que su filosofía es “ahora o nunca, no hay más allá”. ¿Qué hacer: aceptamos o rechazamos tal concepto? Urge que respondamos esa pregunta, porque de la respuesta dependerá la vigencia o no del Espíritu Santo en nosotros y que intentemos o no difundir el mensaje de Dios.

Reflexión de hoy

Dios nos regaló esta vida, pero debido a que el pecado la convirtió en perecedera -lo que no está de acuerdo con su plan de que fuera perfecta- como Él cumple todos sus planes, nos ofrece la oportunidad de que le ayudemos a hacer realidad su proyecto original. ¿Sabía Dios que Adán y Eva, dotados de libre albedrío, pecarían? Sin duda que lo sabía, pues Él todo lo sabe. ¿Sabe Dios que la mayoría de nosotros hará poco o nada para colaborar con Él y ser parte el paraíso eterno? Sin duda lo sabe. ¿Y nosotros qué sabemos? ¿En qué estamos? ¿Nos conformaremos con sólo vivir esta vida? Son interrogantes que cada uno debe hacerse con todo rigor. (Diario Divino 11-14-08)

Reflexión de hoy

A Dios tenemos que pedirle a diario, reiterarle permanentemente aquellas peticiones por las cuales estamos a la espera. Ninguna de nuestros pedidos cae en saco roto. Si son hechos con fe verdadera y a nombre de Jesús, con una vez que pidamos es suficiente, pues Él, en su tiempo, nos va a complacer. Lo que garantizamos con nuestras peticiones diarias al Padre es llegar al convencimiento de que de Él dependemos para la consecución de todos nuestros proyectos. Lo que logramos es conocer que es el único puerto que da acceso a la eternidad. Pedirle al Padre es acercarse a Él y, al mismo tiempo, es cambiar nuestra rutina de vida para hacernos merecedores de ser complacidos.

Reflexión de hoy

Hoy voy a dar un testimonio de lo ventajoso que es adentrarse en la búsqueda de Jesús, y de lo importante que es alcanzar aunque sea un poquito de fe en el Padre. En los últimos 13 años he pasado tres veces, exactamente en el mismo lugar de mi cuerpo, por un proceso quirúrgico generador de angustias antes de ir al quirófano y de convalecencia dolorosa e incómoda. Hace dos días, cuando me tendieron en la mesa de operaciones, boca arriba, observé las lámparas muy similares a las que me llenaron de inquietud e incertidumbre en mis primeras dos operaciones, pero todo fue muy distinto el lunes -confiado en que Dios estaba cerca de mí y recordando el mandato de tener valor y firmeza- sonreía tranquilo cuando empezaron a anestesiarme. Y desperté con la misma tranquilidad, aunque, naturalmente, sintiendo punzadas de dolor.

Reflexión de hoy

Este es el mejor día para aprender, no importa la edad, porque es ahora cuando estamos deseosos de conocimientos que nos ayuden a profundizar nuestra relación con Dios. Este es el mejor día para cumplir los propósitos que motivaron al Padre a crearnos. Hoy debemos agradarlo y servirle. Imitemos hoy a Jesús. Integrémonos hoy a la familia de Cristo. Cumplamos hoy nuestra misión. Hoy no nos lamentemos por lo que no hicimos ayer ni creemos la angustia de esperar hasta mañana. Hoy sólo actuemos.

Reflexión de hoy

Someter por completo la mente es tarea que los humanos no podemos cumplir. Lo demuestra el hecho de que, con frecuencia, cuando más centrados estamos en nuestras reflexiones o meditaciones, incluso orando, nos asalta una preocupación, un pensamiento totalmente divorciado del propósito de entrega al Padre que tenemos en ese momento. Ahora bien, con la confianza en Dios podemos tranquilizar el pensamiento. Y eso es algo de importancia vital, porque “la mente tranquila es vida para el cuerpo”, Proverbios 14:30. En otras palabras, es salud física. ¡Ah la fe que hace cosas!

Reflexión de hoy

Hay una duda que no nos daña, porque no es por falta de fe en el Padre. Se trata de la que el Diccionario de la Lengua Española define como “filosófica” y que consiste en la “suspensión voluntaria y transitoria del juicio para dar espacio y tiempo al espíritu a fin de que coordine todas sus ideas y todos sus conocimientos”. Esta duda es beneficiosa, porque en el momento en que damos espacio y tiempo al Espíritu, nuestra imagen y semejanza con Dios, en realidad lo que estamos haciendo es acercándonos a Él. La duda filosófica es más bien una reflexión, una meditación que tranquiliza la mente.