Reflexión de hoy

Dame freno, Padre, para nunca actuar impulsado por dolor o ira. Dame agilidad para entregarte cualquier dolor o ira; entregarte, entregándome a Jesús, es la única manera segura y rápida de vencer el dolor y la ira. Ayúdame a no intentar, ¡jamás!, luchar contra la adversidad y el enojo por mi cuenta, sin buscar, a través de Jesús, Tu auxilio primero.

Reflexión de hoy

Padre, me regocija saber que buscar a Jesús para encontrarlo es orar con el corazón, amar con el corazón, actuar con el corazón. Me entusiasma saber que Jesús reside en el corazón y que de ahí no se moverá hasta que Tú le ordene ejercer el reinado del mundo que conocemos. En Nombre de Jesús, gracias por decírmelo, Padre.

Reflexión de hoy

Vivir entre palabras y flores
vivir entre buenas palabras y buenas flores
vivir entre Tus palabras y Tus flores
vivir: recoger, acariciar, entregar Tus palabras y Tus flores
es mi aspiración máxima. Tú lo sabes, Padre, concédeme eso,
en nombre de Jesús te lo pido.

Reflexión de hoy

Gracias, Padre, por darme el deseo y la fuerza para perseguir a Jesús, lo que ahora me da genuina alegría. La fe en Tu bondad en la tierra de los vivientes es energía pura para seguir adelante. Ya lo dijo el salmista (27:13): “Hubiera yo desmayado, si no hubiera creído que había de ver la bondad del Señor en la tierra de los vivientes”.

Reflexión de hoy

La alegría por Tu gracia potencia las otras alegrías que recibo de familiares y amigos queridos; de la música y del baile; de la lectura y la escritura; de la observación y la captación; del perdón y el buen consejo, del ejercicio del sano y buen vivir. Gracias, Padre, en nombre de Jesús

Reflexión de hoy

Las otras alegrías que disfruté en el pasado, las que disfruto hoy y las que disfrutaré mañana fueron, son y serán buenas algunas y muy buenas otras, pero ninguna alcanzó ni alcanzará la excelsitud de la alegría por Tu gracia, Padre, pues ésta es la firme alegría, la genuina alegría de la sensatez, de la prudencia, de la ecuanimidad, de la cordura; es la imperturbable alegría de la madurez, de la reflexión, de la objetividad, de la mesura, de la tranquilidad. Gracias, Padre, en nombre de Jesús.

Reflexión de hoy

Períodos hubo, y no cortos, en los que solía buscar la “alegría de vivir” destapando con gran placer una botella, mucho mayor si era en el entorno de una barra, mi refugio bullicioso cuando corría de la paz del hogar, de la caricia a un libro, del crepúsculo de la tarde, del cielo estrellado, del sueño importante de la medianoche y, lo peor, de tu mirada, Padre. Qué bueno que por Tu gracia, ahora lo sé, escapé a tiempo y casi ileso de las bebentinas que me resultaban placenteras.

Reflexión de hoy

¡Oohh! Tu gracia, Padre, es el placer de la paz. Cuando permito que Tu gracia me llene, librándome de preocupaciones y distracciones innecesarias, alcanzo los más altos picos del sosiego, de la serenidad, del reposo, de la calma, de la moderación, de la amabilidad. Padre, en nombre de Jesús te pido, permite que yo pueda siempre llenarme de Tu gracia y hazme servidor permanente Tuyo.

Reflexión de hoy

¡Qué buen sueño tuve anoche, Padre! Ver viejos amigos y lugares recorridos tiempo atrás alegra, aunque sólo sea soñando. Pero, Tú sabes, lo que más me alegra de ese sueño es haber visto en su casa a la madre de unos amigos sentada en el mismo lugar que solía hacer sus lecturas cristianas, tejer o descansar y que le dije al despedirme junto a uno de sus hijos: “no se preocupe, ya no bebo porque soy cristiano”. Gracias, Padre, en nombre de Jesús, porque el sueño es el motor de la realización.

Reflexión de hoy

Me pongo a pensar, Padre, en la cantidad de nombres con que Tú eres llamado y me maravillo. Pero los nombres que más me sorprenden son los que usan algunos científicos, tales como Selección Natural, Evolución Natural, Generación Espontánea y otros parecidos con los cuales te nombran al hablar del origen del mundo y de nosotros como especie.

Reflexión de hoy

Gracias por el esplendor que me ofrece este día. En pleno invierno, sol de verano. Esas son de Tus maravillas, puestas para el disfrute de la sensibilidad y el placer más puros. Hoy, Padre, estoy ligero de mente y con la misma sensación de alegría de quien aprueba un examen, de quien pasa con éxito una prueba captando la bondad de la misma. Gracias, en nombre de Jesús.

Reflexión de hoy

Padre, muy agradecido me siento porque la seguridad y la paz que Tú me ofreces, gracias a que busco a Jesús, se han convertido en un fuerte difícil de ser burlado por ocurrencias repentinas que no son de mi agrado. Celebro por el control puesto por Ti en mí, mediante el cual voy pasando pequeñas pruebas que me fortalecen para servirte sin desmayos cuando Tú lo consideres.

Reflexión de hoy

Gracias, Padre, por las repentinas novedades que me llegaron esta semana, especialmente la de ayer. Sé que detrás de la obligatoriedad de recluirme por un par de días en la casa hay una buena causa que voy a ver manifestada.

Reflexión de hoy

Padre, para la humanidad debería ser más que suficiente la muerte de Jesús en la cruz para aceptar y amar la creación como el fruto de tu voluntad. Sin embargo, hay quienes no se conforman con no aceptar sino que ponen todo su empeño, en vano esfuerzo, para crear teorías que cuestionan Tu existencia. Quiero saber porqué Tú permites eso; dame las indicaciones para encontrar la razón, en nombre de Jesús te hago la petición.

Reflexión de hoy

Padre, ¿qué nos falta por hacer y ver a los humanos de este tiempo? ¿Es Tu deseo dejar que por cuenta propia cada quien compruebe que por más que invente el hombre no podrá destruir Tu obra? Las preguntas, Tú lo sabes, son porque cada día más la perversidad es la norma que rige a quienes conducen naciones y el mundo. Hago uso del “pide y se te dará” dictado por Jesús para pedirte que imponga Tu ley en la tierra. Escucha el clamor de los millones que invocamos la manifestación de Tu autoridad.

Reflexión de hoy

Padre, de acuerdo a lo que me dicta mi muy limitado entendimiento, es ahora el mejor momento -por Tu gracia soy saludable y puedo valerme por mi mismo- para que Tú me utilices, para que se cumpla Tu voluntad en mí. Así lo pienso, pero sé que el cuándo y el cómo te voy a servir es Tú decisión. Te pido con vehemencia, pero espero con paciencia. Gracias por escucharme, en nombre de Jesucristo.

Reflexión de hoy

¡Qué bueno, Padre! Ahora, “coincidencialmente”, por dondequiera que voy me encuentro con personas que me hablan de Ti con propiedad y convicción edificantes. Son fieles conocedores de Tu palabra, las cuales transmiten con entusiasmo y maestría dignos de ser emulados. Sé que son mensajeros Tuyos que me ayudan a ver el camino para seguir a Jesús. ¡Gracias!

Reflexión de hoy

Padre, una de mis aspiraciones para este año es lograr la identificación del o los proyectos que Tú quieres que yo realice para Ti. Indícame, pues es mi deseo complacerte. Te reitero las gracias por proporcionarme las facilidades para viajar y hacer una animada y larga travesía sin incidentes a la partida y al regreso a mi hogar en la tarde de hoy, luego de disfrutar de un cálido recibimiento de 2010.

Reflexión de hoy

Gracias, Padre, al hacerme consciente de que soy uno contigo en espíritu mi vida se torna equilibrada y los temores desaparecen.

Reflexión de hoy

Padre, gracias por el gran recibiento que dimos a 2010 en una reunión familiar que por tu providencia fue muy espléndida y alegre. Provéeme de lo necesario siempre y dame la luz para encontrar a Jesús.