martes, 14 de octubre de 2008

Reflexión de hoy

Si pensamos un poco, nos damos cuenta de que Dios lo ordenó todo para que nos coloquemos donde deseamos con un solo paso, y ese paso tiene por nombre decisión. Por disímiles que sean los sentimientos y las actitudes, siempre están una al lado de la otra, separadas por una línea muy delgada que podemos atravesar con un simple cambio en nuestro proceder. En un momento de luz, cualquiera puede decidir dejar la maldad para entregarse a la bondad, pasar de depredador a protector, de borracho a beato, de odiar a amar… La lista puede hacerse interminable, pero siempre encontraremos que pasar de un campo opuesto a otro es tan sencillo como decidir un cambio en la manera de pensar, y luego actuar.

1 comentario:

Unknown dijo...

Gracias, don Rafael, por esta reflexión. La Madre, interceda,como en Caná. El Espíritu trabaje con nosotros, a Su manera...Y que nosotros se lo permitamos. A veces me he visto tan débil...o "adicto a mí personalidad aprendida", respondiendo de modo mecánico, que he comprobado cuánto me engaño a mí mismo, me justifico, y me reciclo!Lord, have mercy!