sábado, 1 de noviembre de 2008

Reflexión de hoy


“Hermanos míos, ustedes deben tenerse por muy dichosos cuando se vean sometidos a pruebas de toda clase”, Santiago 1:2. El consejo lo basa en que quienes aprueban recibirán como premio “la vida (eterna), que es la corona que Dios ha prometido a los que le aman”. Para aceptar de buena gana ser probado, se debe tener la actitud de aquellos que aprenden a ejercer confiados oficios en los cuales trabajan a alturas y en condiciones que dan miedo a la mayoría, porque un error mínimo significa muerte o lesiones graves. Sólo porque piensan en la buena paga al final de la semana esos trabajadores pasan la prueba del miedo, resisten y se hacen diestros.

1 comentario:

Unknown dijo...

Sigo contando con sus oraciones e intercesión. Gracias, Amén!