sábado, 19 de enero de 2013

De mi depende



Padre, tu amor a la humanidad es inagotable, inquebrantable, invariable. Aceptar que es así me beneficia, y dudarlo, aunque sea un instante, me perjudica. De mí depende mi bienestar. Gracias, Jesús, por abrir mi entendimiento.

No hay comentarios: