Reflexión de hoy

Parece mentira, pero la importancia de aparentar ha sido atornillada de tal forma en la mente del humano moderno que ser una valla anunciadora rodante es timbre de orgullo para todo el que tiene capacidad económica para pagar por el derecho de hacerle propaganda en la prenda que lleva puesta a algún diseñador famoso. El humano moderno tiende a rechazar las conversaciones sobre el tema espiritual presumiendo de su independencia de criterio, pero acepta ser autómata que le paga caro y religiosamente a quien le manipula su vanidad.