lunes, 12 de agosto de 2013

Pregunta suprema

¿Para qué fui creado? Para con plena libertad tomar mi rumbo y disfrutar mi decisión de resolver mi vida siguiendo el ejemplo de obediencia de Jesús y cumpliendo tu mandato divino, Padre, con amor, entusiasmo, devoción, admiración, confianza y sumisión porque del resto Tú te encargas. 

No hay comentarios: