lunes, 28 de junio de 2010

Reflexión de hoy

Te encomiendo mi mente, Padre. Te entrego mi libre albedrío para que no permitas que yo haga nada sin tu anuencia; para que no dejes que yo haga nada que te desagrade. Gracias por escucharme y complacerme, en nombre de Jesús, quien vive y reina.

No hay comentarios: