viernes, 4 de junio de 2010

Reflexión de hoy

Padre, Tú me has dado tanto desde que nací, y más en los últimos tiempos, que puedo pasarme el resto de mi vida dándote gracias y nunca podré darte toda la que Tú mereces. Reviso lo escrito en los momentos de reflexión y me regocija la prodigalidad tuya. Has complacido las peticiones que te hice para que me dieras palabras para escribirte; tantas me has dado, ¡y tan a tiempo!, que han sido firme sostén en el período difícil que me toca atravesar en esta etapa de hombre viejo.

No hay comentarios: