miércoles, 28 de abril de 2010

Reflexión de hoy

¡Qué tercos somos, Padre! Para nosotros debería ser más que suficiente el sacrificio de Jesús para vivir con entusiasmo entregado a Ti, pero todavía habemos quienes nos entregamos con titubeos, quienes no sólo rechazan entregarse sino que se dedican a construir teorías que en vano empeño proclaman la negación de tu existencia. Padre, conduélete, y ven a poner orden, ejerce tu poder en la tierra ahora.

No hay comentarios: