sábado, 1 de enero de 2011

Reflexión de hoy


Gracias, Padre, por este primer día del 2001 lleno de lucidez e ilusión, sin resaca. Una manera extraordinaria de empezar el año, con mente totalmente clara de que debo buscar a Jesús todos los días de mi vida, pues sólo así alcanzaré la plenitud espiritual.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cuánto me alegra saber, hermanito, que no tienes resaca...El Padre te fortalezca, sostenga y guíe...hacia Jesús...el Amado Amigo Fiel...Todo en el Santo Espíritu. Todas las bendiciones que puedas necesitar, cada día...de ahora en adelante: 2011 y siguientes...