De lo que pedimos tenemos

Jesús, pienso en lo siguiente: en su tiempo, que siempre es ahora, el Padre nos da todo lo que le pedimos. De hecho, siempre tenemos todo lo que necesitamos en su espíritu puesto en nosotros. Por ello, si pedimos paz aparecen las oportunidades, vestidas de dificultades, para que comprobemos que la tenemos. Si pedimos amor, situaciones no nos faltarán para que demostremos cuanto poseemos. Dime si estoy en lo cierto, Jesús. Gracias.