Es curioso que siendo más espíritu que materia
nos ocupemos más de la materia que del espíritu. Ayúdame, Jesús, en mi deseo de
prestarle todo el tiempo más atención a mi espíritu que a la materia; ayuda a
mis familiares, a mis amistades y a todos los que en el mundo tengan el deseo
de hacerlo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario