miércoles, 17 de marzo de 2010

Reflexión de hoy

La voz de Jesús es audible para los sordos. La presencia de Jesús es visible para los ciegos. Jesús moviliza a quienes carecen de piernas. Jesús le alcanza lo que necesita aquel que no tiene brazos. Jesús clama por el que no tiene voz. Padre, todo es posible para quien aferrado a Tu Espíritu en su interior decide superar cualquier carencia física, miedo o enfermedad, apoyándose en Jesús. Oh, Padre, el mundo está lleno de personas que viven superando la adversidad en cada momento de su existencia y los “completos” vivimos ignorando las lecciones que nos ofrecen.

No hay comentarios: