viernes, 17 de junio de 2011

Reflexión de hoy


Cuando releo mis reflexiones, Padre, me siento agradecido. Tú me has dado las palabras con las cuales me dirijo a ti, y no han sido pocas. Y, lo más importante, el ejercicio diario de escribirte un párrafo ha enriquecido mi vida, mi pensamiento, mi espíritu con una sublime sensibilidad que sólo puede venir de ti. Gracias, en nombre de Jesús.

No hay comentarios: