Es magnífico, muy gratificante, tener la oportunidad de empezar el día dándote gracias, Padre, por lo ocurrido la víspera, además de arrodillarme para iniciar junto a Ti la jornada de hoy. Gracias, en nombre de Jesús. Unido a Cristo todo lo puedo, de eso ya puedo dar fe.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario